En las últimas semanas, las redes se llenaron de imágenes que parecen salidas directamente de una película de Studio Ghibli: selfies, fotos de familia y hasta memes con ese look suave y nostálgico en tonos pastel.

¿El culpable? La nueva actualización de ChatGPT de OpenAI, que ahora permite generar imágenes al estilo Ghibli en segundos. Fue tan popular que los servidores colapsaron.

Aunque es increíble lo que se puede hacer, también ha generado debate: ¿qué pasa con los derechos de autor cuando una IA recrea estilos tan icónicos? Muchos artistas sienten que su trabajo se reduce a un «filtro más». 

Legalmente, los estilos no se pueden registrar, y eso tiene sentido: si alguien pudiera adueñarse de todo un estilo visual, se limitaría la creatividad de los demás. Pero el debate apenas empieza.

Una cosa es imitar estilos generales… pero otra muy distinta es replicar la esencia artística de alguien tan reconocido como Greg Rutkowski. Este ilustrador polaco ha sido uno de los más utilizados como referencia en generadores de imágenes con IA, con más de 93,000 solicitudes en plataformas como Stable Diffusion.

El problema es que cuando una IA puede copiar tu estilo con solo escribir tu nombre, no solo afecta tu trabajo actual, sino también tu reputación y legado. ¿Dónde queda la autoría cuando tu forma de crear se convierte en un «filtro» más?

Esta controversia ha hecho que muchos usuarios de redes sociales entren en debate… ¿Tú qué opinas de este tema?